Se preveía un día duro, en el punto de encuentro se oían mil excusas de los motivos por los cuales algunos no pudieron venir, también hubieron algunos indecisos que al final dieron el paso hacia delante y decidieron venir, desconozco si se arrepintieron.
Una jornada épica donde los valores de esfuerzo y superación hicieron más que nunca su aparición. Con la ascensión por la Senda Dolça, habíamos dejado atrás el Pí del Alivi, ya casí habíamos acabado el tramo de la ascensión más complicada de nuestras salidas, entonces hizo aparición la lluvia con la intención de hacernos abandonar la consecución de nuestra meta, vivimos momentos de tensión y frustración por la posibilidad de tener que abandonar después de haber superado el trecho más duro que nos llevaría hasta hasta la cima y lograr nuestro objetivo. Tras un intenso debate decidimos sobreponernos y dibujar un sol para continuar y retar al mal tiempo, logrando así superar el resto de la subida.Realizamos una parada para recuperar fuerzas en el Valle de los Pinos y desde allí hicimos un último esfuerzo para conquistar nuestro tercer pico con más de 8.000 dm. el Puntal de Matamoros, donde la naturaleza nos sorprendería con espectaculares instantáneas.
La bajada realizada por la cara norte con abundante vegetación y con alguna que otra caída gracias a lo resbaladizo del terreno.
Incluimos el recorrido que hicimos pr-cv109 a falta de la ascensión al Puntal de Matamoros, ya que el rutometro oficial estuvo apagado o fuera de cobertura.
Un saludo a todos asistentes o no y hasta la próxima
El equipo de Senderalbatera
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